Día 25.
07/04/2020
Las ciudades silenciosamente vacías. Los nuevos y provisionales hábitos parecen tan irreales. Como una broma de mal gusto que no causa ninguna gracia. Y cada minuto busco las noticias que ofrezcan una luz por pequeña que sea, para alimentar el optimismo. Y exploro los rincones la paciencia necesaria para recuperar la vida.
Ella y él, y yo… esperando sus abrazos.
Seguimos y mucho ánimo amigos.
Me quedo en casa.
No hay comentarios:
Publicar un comentario